La verdad es que no me había quedado muy a gusto con lo que le había dicho, a lo mejor había sido demasiado fuerte, quizás perdí los nervios pero todo lo que había dicho era verdad. Al no estar conforme, voy a su camerino.
-¿Puedo pasar?
-Sí.
-Oye, Dani, creo que antes no era el mejor momento para hablar, lo siento, ¿vale?
-No lo sientas ¿qué hay que sentir? solo has dicho lo que piensas.
-Ya, pero de una forma un poco ¿borde?
-Nah, tranquila, es normal estar así cuando se está mal y más si pasa lo que te pasa a ti.-Miro al suelo al pensar en Miki, él nota que no estoy demasiado cómoda y me da un abrazo.-Esta noche vamos a quedar para cenar en mi casa, ¿te vienes?
-¿Quienes van?
-Pues Raúl, Cris, Moni, David, Juanger... los de siempre.
-Y ¿a qué hora sería eso?
-Podéis ir cuando queráis, yo voy a estar en casa todo el día.
-Si no quemas la cocina yo voy.-sonrío.
-¿Yo? ¡Pero si yo cocino perfectamente!-ríe él también.
-Sí, sí... Pues entonces iré pronto, en casa no hago nada y por lo menos tengo algo de compañía.
-Así me gusta.-me hace una caricia en la espalda y me voy.
Pasa la mañana tan normal como siempre. Intento que no se me note mucho mi estado de ánimos aunque muchas veces no lo consigo. El programa también muy bien, Dani sabe que no estoy demasiado bien e intenta hacerme bobadas para que yo me ría. Vuelvo a casa. Busco la ropa que me voy a poner y después de media hora sin parar de sacar ropa del armario encuentro unos pantalones pitillos negros y una camiseta con tonos oscuros también, me pongo los zapatos, cojo el bolso y una chaqueta y como había prometido, voy a casa de Dani. Es demasiado pronto y no ha llegado nadie más.
-Buenas tardes.-me dice antes de darme dos besos.-Pasa.
-¿Ya estás al lío de la cocina?
-Sí, aquí estoy y de momento no he hecho nada malo, tranquila.
-Es cuestión de tiempo.-digo entre risas.
-Anda, ven y ayúdame.-Vamos los dos a la cocina y empezamos a hablar.
-¿Y tú que tal con Cris?
-Nosotros como siempre, ya sabes, con nuestras peleillas y esas cosas pero bueno.
-Me alegro.
-Vamos al salón si quieres.-Vamos y nos sentamos. Él en el sofá y yo en el sillón.-¿De qué quieres hablar?
-No sé, propón tú un tema o algo, que siempre empiezo a hablar yo y acabamos mal.
-Pues... hablemos de palomitas.
-¿¡Palomitas!?-río
-Mismamente. ¿Cómo te gustan con mantequilla o normales?
-¿En serio?-sigo riendo a carcajadas. Con...¿mantequilla?
-Yo prefiero las normales.-dice como si estuviéramos hablando del tema más normal del mundo.
-¿Lo ves normal?
-¿El qué, las palomitas?
-¡Dani!
-Si te das cuenta te estás riendo y yo también, creo que hemos topado con un buen tema. Ahora te toca a ti.
-¿A mí? Creo que no se me ocurrirá un tema tan bueno como el tuyo...-digo con un tono un poco irónico.-¿Sillas?
-Sillas, está bien. ¿Con brazos o sin brazos?
-Sin, supongo. ¿Y tú?
-Con, los brazos de una silla son importantes.-ríe.
Seguimos hablando de estas tonterías. No creía que me hicieran tanta falta pero al parecer sí... Ponemos la mesa y preparamos todo. Van llegando los chicos, al final somos bastantes más de lo que pensaba. Cenamos haciendo bromas, que es lo que mejor sabemos hacer.
-¿Este fin de semana qué vas a hacer?-me dice Raúl.
-Este fin de semana tengo que ir a Mollet a hacer unas cosas importantes para mí..
-¿Algo malo?
-Sí.
-¿Quieres contarme?
-No, pero no por ti sino porque, jobar, estamos aquí todos juntos, no es plan de ponernos tristes ¿no?
-Tienes razón, suerte de todas formas.-me sonríe.-Oye, te están llamando al móvil.
-Un momento.-Es un número oculto, me alejo unos metros de todos y descuelgo el móvil..-¿Sí?
-Anna, soy Miki. Tengo que hablar contigo.
-Dime.
-Mañana voy a ir a Madrid para hablar contigo de nuestra relación. Ni tú ni yo estamos a gusto, estoy hay que hablarlo acabe como acabe. No merece la pena retrasarlo, solo estaríamos negando lo evidente.
-¿A qué hora y dónde te espero mañana?
-Creo que llegaré por la mañana, con que estés como a las 12 en la puerta de plató me vale.
-Ahí estaré, hasta mañana.
-Un beso.
-Un beso.
No estaba preparada para esta llamada y, como siempre, necesito pensar sola.
-Dani, ¿puedes venir un momento? tengo que comentarte algo.
-Dime.
-Me ha llamado Miki.
-¿Y? ¿Qué te ha dicho?
-Me ha dicho que mañana viene a Madrid por la mañana para aclarar las cosas.
-¿Y no es lo que querías?
-Sí pero no tan de repente.
-Tú sabrás qué decir, de todas formas si quieres mañana por la mañana desayunamos juntos y hablamos un rato.
-Yo mañana te llamo. Me voy a ir a casa ya, ¿vale?
-Quédate un rato más, mañana será mañana, disfruta de hoy.
-No, Dani. Además estoy un poco cansada. Me despido de estos y me voy.-Vuelvo al comedor donde están todos.-Chicos, yo me voy ya. No os acostéis muy tarde que mañana hay que trabajar ¿eh?-digo aportando el toque humorístico.
-Se le ha hecho tarde a la abuela.-ríen todos.
-Pues lo dicho que hasta mañana.
CONTINUARÁ...
esta muy bien este segundo capitulo :) siguiente! :3
ResponderEliminar