Me doy un baño con agua caliente para relajarme de este día tan ajetreado. Me pongo la ropa de andar por casa para estar más a gusto. Veo un rato la tele. Cómo Conocí A Vuestra Madre y Dos Hombres Y Medio.
Llegan las 8. Empiezo a prepararme. Un vestido negro de vestir con unas medias del mismo color y unas botas algo informales. Me maquillo, no demasiado. Pintalabios rojo, sombra de ojos y poco más. Me quito mi coleta y me peino un poco. En el programa he tenido el pelo liso así que lo mantengo.
Salgo de casa. Voy andando para dar una paseo.
Es ya bastante de noche y hace mucho frío así que cojo el camino más corto. Camino durante unos minutos. Casi he llegado ya. Subo unas escaleras que hay a unos metros de su casa pero cuando ya estoy arriba del todo me doy cuenta de que he visto a una cara conocida. Retrocedo un poco hasta llegar al primer escalón donde veo a un chico sentado con los codos apoyados en las rodillas frotándose los ojos.
-Perdona, ¿te conozco?
Parece sonarle mi voz. Levanta la cabeza y mira hacia arriba para reconocerme la cara.
Parece sonarle mi voz. Levanta la cabeza y mira hacia arriba para reconocerme la cara.
-¡Anna!
Se levanta, aparta la mirada unos segundo mientras se seca las pocas lágrimas que caen de sus ojos.
-¿Qué pasó, Dani?
-He salido un rato para que me diera el aire, ¿y tú?
-He salido un rato para que me diera el aire, ¿y tú?
-No te creo.
-He discutido con Cris y hemos roto, esta vez para siempre.
Le paso la mano por el hombro y hago que nos sentemos.
-Un momento, voy a hacer una llamada y enseguida vengo.
Me aparto unos metros mientras llamo a Romi para decirle que no estaré en la cena. Me invento una pequeña excusa, es mejor no decir nada. Vuelvo a ese primer escalón.
-¿Y cómo te has venido hasta aquí?
-Necesitaba que me diera un poco el aire para poder pensar bien y este es un lugar alejado y oscuro, donde no hay rastro ni de ella ni de nadie. ¿Y tú?
-Iba a una cena pero no pasa nada, me quedo contigo, si quieres vamos.
-Iba a una cena pero no pasa nada, me quedo contigo, si quieres vamos.
Acepta con la cabeza. Continúa contándome lo que les ha pasado.
-...Y lo peor es que yo pensaba que ella era la definitiva pero parece ser que no. Pensaba que pasaría mi vida con ella, pero ella no pensaba los mismo. Y ahora estoy solo.
-Daniel, las tres fases. La primera, sentirse solo, pásala porque eso no es así. Hay miles de personas que están contigo además de tu familia y de nosotros, tus amigos. La segunda, contárselo a alguien. Sabes que estoy aquí para todo, ahora mismo estamos hablando pero si necesitas hablar más ya sabes. Y la tercera, la tercera es la de salir y olvidarse de todo. Esa es la mejor.
Consigo sacarle una pequeña sonrisa.
-Te quedas con todo, hija. No, pero yo hoy no estoy como para hacer nada, ni mañana, ni pasado...
-¿Y te crees que yo cuando lo dejé con Miki sí? Pues no, pero tú me obligaste y crees que no, pero me ayudaste mucho.
-Vale, saldremos, pero hoy no. Hoy no tengo fuerzas para nada.
Ponemos camino sin rumbo. Llegamos al centro de Madrid casi sin darnos cuenta. Hay muchísima gente y él no tiene muchas ganas de estar con nadie. Vamos a su casa. Me quito el abrigo, él se tira en el sofá.
-¿Quieres hacer una cosa con la que puede que lo pases muy mal ahora pero con la que mañana te sentirás muy bien?
-Visto así muy bien no suena.
-¿Quieres o no?
-Sorpréndeme.
-Meter en una caja todo lo que tienes con ella que no quieras tener. Yo lo tuve que hacer sola y lo pasé muy mal.
-¿Ahora?
-Sí.
-Sí.
Coge una caja que guarda en la terraza.
-¿Por dónde empezamos?
-Por donde tú quieras.
-Habitación.
Subimos a la habitación. Empieza a coger fotos y algunos objetos que guardaba de viajes.
Nos recorremos la casa entera así. Tiene muchas cosas, se nota que estaba perdidito por ella y por lo que tenían.
Nos tiramos al sofá cansados.
-¿Y ahora qué hago con esto?
-Lo que tú quieras. ¿Qué quieres hacer con tu relación con Cris?
-Olvidarla.
-Olvidarla.
-Pues entonces-cojo la cinta de celofán y empiezo a cerrar las cajas.-se meten en un lugar donde guardes las cosas que no usas para nada pero que de vez en cuando puedes ponerte a mirar.
Las guardamos en un pequeño rincón del sótano.
-¿Y habéis quedado muy mal?
-Sí. Nos hemos dicho de todo. En fin...-mira el reloj de la pared de su salón.-Es tarde, deberías irte o si no mañana no serás persona.
-Tienes razón.
Le doy un abrazo. Esconde la cabeza en mi cuello. Después de unos minutos se separa.
-Por cierto, ha sido una pena que te hayas quedado conmigo esta noche en vez de haber ido a la cena, estabas muy guapa.
-Que tontito eres.-Le hago una pequeña caricia en la mejilla derecha.
-Muchas gracias por todo Annita. No sé qué haría yo sin ti...
-Nada. ¿Qué vas a hacer tú sin mí? ¡nada!
-Poco modesta nos salió la chica...
-Me dirás que es mentira.
-No, no es mentira. Sin ti nada.
Esa sonrisa, y su mirada fijada solamente en mis ojos. Me siento incómoda, no estoy acostumbrada a que alguien me diga cosas así. Aparto la mirada con una sonrisa en la boca que no puedo evitar tener. Un silencio incómodo de estos de película que es irrompible. Al final me decido. Es hora de despedirse aunque en cierto modo no tengo ganas de irme a casa. Otra sensación extraña. ¿Qué me pasa?
-Me voy ya a casa, ¿vale? Pasa buena noche y no te rayes mucho. Mañana hablamos.-sin dejar de sonreír voy abriendo la puerta.
-Espera un momento Anna.
-¿Qué pasa?-cierro la puerta.
-Nada, nada. Que pases buena noche.
Hace una sonrisa de esas que haces cuando ibas a decir una cosa y al final no la dices porque no sabes si harás mal o bien.
Salgo de su casa nerviosa. ¿Por qué esto tan de repente? Esas frases que no dicen lo que él quiere y esas frases en plan "sin ti nada." No paro de darle vueltas. La cosa es que a mí eso me encanta, me enamora.
CONTINUARÁ...
-Muchas gracias por todo Annita. No sé qué haría yo sin ti...
-Nada. ¿Qué vas a hacer tú sin mí? ¡nada!
-Poco modesta nos salió la chica...
-Me dirás que es mentira.
-No, no es mentira. Sin ti nada.
Esa sonrisa, y su mirada fijada solamente en mis ojos. Me siento incómoda, no estoy acostumbrada a que alguien me diga cosas así. Aparto la mirada con una sonrisa en la boca que no puedo evitar tener. Un silencio incómodo de estos de película que es irrompible. Al final me decido. Es hora de despedirse aunque en cierto modo no tengo ganas de irme a casa. Otra sensación extraña. ¿Qué me pasa?
-Me voy ya a casa, ¿vale? Pasa buena noche y no te rayes mucho. Mañana hablamos.-sin dejar de sonreír voy abriendo la puerta.
-Espera un momento Anna.
-¿Qué pasa?-cierro la puerta.
-Nada, nada. Que pases buena noche.
Hace una sonrisa de esas que haces cuando ibas a decir una cosa y al final no la dices porque no sabes si harás mal o bien.
Salgo de su casa nerviosa. ¿Por qué esto tan de repente? Esas frases que no dicen lo que él quiere y esas frases en plan "sin ti nada." No paro de darle vueltas. La cosa es que a mí eso me encanta, me enamora.
CONTINUARÁ...
biiiieeeennnnnnnnnnn!!!!!!! Dani ya no esta con la putuche uuuppssss perdon pedroche...... Vamos a ver Daniel sal de tu casa y dile que se quede a dormir que necesitas compañía joder!!!!! Asi no llegas a ninguna parte... Bueno bueno bueno señorita Inés me ha gustado mucho mucho mucho el capitulo y tu dirás por que señorita mariapusicrazy? Pues porque Dani y putoch.... Digo pedroche ya no estan juntos!!!! :D jajajaja pues eso que lo de siempre: siguiente cielo! <3
ResponderEliminarsiguiente me ha gustado <3
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